Fácil y sencillo. Los que me conocéis, sabéis que soy una fanática del washitape. Hay algunos que me gustan tanto que no los uso por pena. Cuando era pequeña ya hacía eso mismo con las gomas de borrar. Las compraba porque me gustaban, pero sin ninguna intención de usarlas. Pues bien, llevo tiempo queriendo encontrar una solución para lucirlos (Les tenía que buscar alguna utilidad, no?) en la mesa del estudio. Y el otro día de casualidad, di con un tutorial para hacer un pequeño dispensador